Desde abril en Terni, se ha comenzado a trabajar para implementar la ‘filosofía’ del Proyecto Erasmus + ‘Educarte en identidad europea’ a través del diseño de un camino diacrónico que analiza la construcción de una identidad europea en el territorio local, leído a contraluz de algunos cruciales momentos de su desarrollo histórico.
Un territorio cuya identidad tiene sus raíces históricas en el mundo romano, que luego se transmuta en la identidad cristiana. La pertenencia ‘política’ de Terni a la Iglesia durante siglos ha ido configurando su fisonomía antropológica, hasta las profundas transformaciones sociales y culturales producidas por la industrialización, que este territorio ha distorsionado y redefinido profundamente.
Terni logró recuperarse del drama del totalitarismo y la locura bélica, experimentando, en los años 60 y 70 del siglo pasado, una temporada de prosperidad y desarrollo que la crisis internacional del acero interrumpió dramáticamente. Ahora la estructura urbana está profundamente marcada por una pérdida de identidad relacionada con la crisis económica, laboral y social.
Solo un anclaje cada vez más fuerte a la dimensión europea puede ofrecer a la ciudad una perspectiva de redención, la difusión de una nueva visión de su futuro, para superar un presente que ha debilitado fuertemente a las generaciones más jóvenes, que parecen estar cada vez más expuestas. al riesgo de degradación, de debilidad identitaria.
Proyectos como este son capaces de ofrecer a los jóvenes la conciencia de cómo las raíces profundas de un territorio rico en historia, de un patrimonio arqueológico, histórico, cultural pueden recibir nuevos estímulos del intercambio intercultural europeo por la redención, por una perspectiva de futuro.
La convivencia democrática, la inclusión, la aceptación del otro, la salvaguarda de los derechos humanos, el respeto a la más amplia gama de diversidades, en todos los ámbitos: social, étnico, religioso, lingüístico, cultural… constituyen valores fundamentales e inalienables que los dolores de la crisis económica parece amenazado. La escuela es el baluarte dentro del cual se pueden salvaguardar los procesos de crecimiento, siempre que se abra a las ofertas educativas y las tome como factor de innovación.
Este proyecto tiene como objetivo fortalecer, dentro del proyecto educativo que persigue la escuela, de una serie de caminos de experimentación de laboratorio de lenguajes sectoriales de las artes que se asumen como factor de cambio, de inclusión, de experimentación de buenas prácticas docentes en los sectores de la educación, las artes, expresión digital, teatral y pictórica, la práctica del Street art como reapropiación del territorio por parte de los jóvenes ciudadanos.
Las actividades de cuidado y aprendizaje de la documentación en video, tanto en la fase de producción como en la postproducción, brindan las herramientas para el procesamiento, difusión de los contenidos y productos desarrollados. Los seminarios académicos que orientan todo el entorno del laboratorio constituyen el marco cultural que da sentido y reflexiona sobre los procesos educativos en curso.
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