La Historia de Europa se ha forjado en el encuentro y el desencuentro. En el conflicto y la colaboración. A pesar de la guerra de Ucrania en territorio “europeo”, el continente vive su época de mayor paz y expansión tras siglos de conflicto permanente. Y eso es debido al afán colaborativo y constructor que surgió tras el horror de la Segunda Guerra Mundial.
La “identidad europea” se ha basado, desde entonces, en la defensa y promoción de los Derechos Humanos, el bienestar social y la igualdad de derechos entre sus habitantes. Unos valores que debemos proteger, difundir y promover entre las generaciones más jóvenes, máxime ahora que están puestos en cuestión.
Ese es uno de los objetivos del programa EducArte en Identidad Europea que cuenta con la financiación del programa Erasmus+ de la Unión Europea, el promover esos valores entre niños y niñas en edad escolar de cinco países colaboradores a través de una red internacional de entidades. Y todo ello empleando el arte como herramienta vehicular para promover la educación desde la emoción.
Hoy compartimos uno de esos trabajos de la red internacional. En concreto de la MUS-E Fondazione ETSde Italia que ha empleado las artes plásticas para trabajar con los alumnos y alumnas del I.C. Cena de Turín. En una de sus sesiones, las chicas y chicos del centro han elaborado “mapas” en arte abstracto mediante líneas y color con una salvedad, y es que no eran obras individuales, sino que, junto a las de sus compañeras y compañeros formaban obras de mayor formato por lo que tenían que coordinarse, colaborar y trabajar juntos para que las líneas, los dibujos, etc, tuvieran una continuidad entre un pliego y el siguiente.
Un trabajo de construcción común que es como se ha forjado Europa.
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